Lo que para los hombres es imposible, no lo es para el Señor San José. Pedir con confianza insistentemente y San José obrará. El Padre Pío recomendaba a sus hijos espirituales: Id a San José con confianza absoluta, porque también yo, como santa Teresa de Ávila, “no recuerdo haber pedido cosa alguna a San José, sin haberla obtenido de inmediato”. Con esta coronilla le pedimos a San José las cosas que para nosotros son imposibles pero que no lo son para él; pedimos con fe y sencillez, pero principalmente le pedimos que ponga su corazón en nuestro corazón, para que amemos a Jesús con toda la entrega, con todo el amor y con todo el desinterés.